Las restricciones en cuanto a aperturas y horarios que están sufriendo bares, restaurantes, hostelería y catering desde el inicio de la pandemia ha motivado una brusca reducción de la comercialización en este canal. Entre tanto, el consumo en hogares acumula espectaculares repuntes. Según el Panel de Consumo Alimentario, elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), la demanda de queso se situó en 394,51 millones de kilogramos en el periodo que transcurre de agosto de 2019 a julio de 2020, lo que supone un 11,3 por ciento más respecto al mismo período del año anterior, por valor de 2.990,47 millones de euros, un 14 por ciento más.
Sin embargo, todavía es muy fuerte la presencia en supermercados e hipermercados de quesos de procedencia foránea y, con frecuencia, de poca calidad. Asimismo, el consumo per cápita es muy bajo, apenas 8,75 kilos por persona y año, cuando la media de la UE se eleva a 17,3 kilogramos. Nuestro país se encuentra en trigésimo séptima posición mundial, por detrás de la mayoría de los países europeos.
La Organización Interprofesional Láctea (Inlac) ha lanzado la campaña “Quesea” para divulgar la oferta de quesos de origen nacional. Secundan esta iniciativa Carrefour, Carrefour Market, Eroski y AhorraMas. Un total de 295 centros, entre supermercados e hipermercados, que muestran de forma diferencial ante el consumidor la amplia oferta de quesos elaborados en alguna de las diecisiete comunidades autónomas con distintivos y señalética propia en los lineales de quesos, vinos y “picos” de los establecimientos.
“El Queso nacional tiene grandes posibilidades de crecimiento en el mercado interior pese al fuerte peso de las importaciones”, ha declarado la directora gerente de Inlac, Nuria M. Arribas, quien valora la importancia de la campaña “Quesea” para intentar divulgar aún más las producciones autóctonas y aprovechar las oportunidades que aún existen para avanzar en la comercialización de quesos “Made in Spain”.
La campaña “Quesea” tendrá tres años de duración (2020-2022), y se ha marcado como objetivos potenciar el consumo de queso español; vincular diferentes tipos de queso a distintos momentos de consumo durante el día; aumentar la cultura del consumidor asociada al queso, consiguiendo una mayor capacidad de diferenciación en cuanto a los distintos tipos de queso español en los lineales y posicionar el queso español en el mercado para competir con otras alternativas de consumo.
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